A partir de hoy, cualquier permiso de aire, nuevo o renovación, que el Departamento de Recursos Naturales (DRNA) tenga que dar para algunas partes del área metropolitana y la zona sur será más restrictivo y, por lo tanto, más costoso debido a la falla en la entrega del plan de cumplimiento con los estándares de calidad de aire para dióxido de azufre.
Específicamente, la agencia deberá exigir una reducción, de 2 a 1, en las emisiones de dióxido de azufre, un gas incoloro cuya exposición a largo plazo puede afectar la función pulmonar y que, a niveles muy altos, puede ser letal.
Fuente: El Nuevo Día