El gobernador Pedro Pierluisi Urrutia ordenó el cierre de todas las operaciones privadas que atienden público desde la medianoche hasta las 5:00 a.m. e impuso limitaciones a a las cirugías electivas a partir de este jueves, como parte de las nuevas medidas restrictivas que anunció hoy para tratar de frenar el repunte del COVID-19.
También queda prohibida la venta y consumo de alcohol en lugares públicos durante este horario, lo que supone una vuelta a Ley Seca adoptada al inicio de la pandemia, y regresa el uso obligatorio de la mascarilla en los lugares cerrados.
Esta nueva Orden Ejecutiva tendrá una vigencia de tres semanas.
“Vacunarse es un acto de responsabilidad ciudadana, de respeto al prójimo, y todos debemos aspirar a un Puerto Rico en el que actuemos poniendo el bien común por encima de todo. Aparte de las acciones y órdenes que emita este gobierno, cada persona tiene que protegerse de forma individual, con las medidas que se han reiterado desde que comenzó la pandemia en marzo de 2020”, insistió Pierluisi Urrutia al inicio de la rueda de prensa en La Fortaleza.
Flanqueado por el secretario de Salud, Carlos Mellado López, el gobernador detalló que esta veda incluye “a locales comerciales, profesionales, no profesionales, de servicio al consumidor, de ventas, de entretenimiento y otros”.
Quedan excluidas de esta limitación de horario, las operaciones privadas que no atienden públicos, tales como manufactura, construcción, comercio, distribución y agricultura. La veda tampoco se extiende a los servicios relacionados a la salud, centros de vacunación, servicios funerarios, puertos, aeropuertos, medios de comunicación, servicios de seguridad, de transportación y utilidades.
Las gasolineras, supermercados, comercios de artículos de primera necesidad, restaurantes con modelo de entrega o delivery, servicios de comida en hoteles y paradores (solo para huéspedes) operarán en su horario regular.
En cuando al uso mandatorio de la mascarilla, Pierluisi Urrutia explicó que esta nueva Orden Ejecutiva también requiere el uso obligatorio de mascarillas en lugares abiertos, donde se agrupen 50 personas o más. Además, exige que el personal clínico en hospitales utilice mascarillas KN-95 o N-95 para su protección.
“Se prohíbe llevar a cabo cirugías electivas, conforme al criterio médico, que requieren la utilización de unidades de cuidado intensivo posterior a la operación”, apuntaló.
Al mencionar las embarcaciones marítimas, indicó esta directriz prohíbe pegar o amarrar varias embarcaciones entre sí, anclar en playas, cayos e islotes a menos de 100 pies de la orilla, con excepción del uso de boyas de amarre o moorings.
