Aunque en la Isla existen varios hospitales y clínicas para servicios ambulatorios, Puerto Rico carece de unidades intermedias lo que complica el tratamiento de salud mental en la isla. En Puerto Rico se brinda servicio de hospitalización parcial e intensivos ambulatorios y las compañías de seguros de salud solo aprueban tratamientos de este tipo para periodos de cinco a siete días, lo que representa una fracción del periodo autorizado en otras jurisdicciones de Estados Unidos, que oscila de 14 a 30 días.