Aunque no existe un proceso para apelar las decisiones del papa, sectores de la comunidad religiosa todavía albergan la esperanza de que se revierta la destitución de Monseñor Daniel Fernández Torres como Obispo de Arecibo. Así opinó el licenciado Carlos Rodríguez quien trabajó con el nuncio en la República Dominicana. El nuncio es el representante diplomático del papa en otro país o estado. De acuerdo a Rodríguez, el papa toma decisiones en base a la información que recibe del nuncio apostólico. Como se dice en el argot religioso, “de Roma viene lo que a Roma va”, apuntó Rodríguez. Rodríguez reconoció que el derecho canónico no establece un proceso para la destitución de un obispo, pero a su juicio “es un principio universal y está en otras partes del derecho canónico el debido proceso de ley”. “No tiene que esta escrito, cuando eres una persona misericordiosa, lo menos que puedes hacer es darle la oportunidad a una persona que estás acusando de algo decirle de qué se le acusa y segundo defenderse”, destacó el abogado en entrevista con Jay Fonseca en Los datos son los datos (WAPA-TV). Monseñor Fernández Torres alegó ayer en declaraciones escritas que nunca se le comunicó por escrito de qué se le acusaba para removerlo como Obispo. “Lo único que le dijeron es que tenía falta de comunión con los demás obispos”, sostuvo Rodríguez. Rodríguez explicó que el papa toma decisiones basadas en lo que le informa la jerarquía local de la Iglesia católica, en este caso el nuncio apostólico. “Si al papa no se le lleva la información correcta o se le lleva información parcializada, o con agendas, él actúa en base a esa información parcializada. Yo tengo que pensar que si el papa se da cuenta que ha actuado en base de información incompleta, parcializada, manipulada, malintencionada, no tengo la menor duda de que el papa podría rectificar”, añadió el licenciado Rodríguez. Según las expresiones de Monseñor Fernández Torres, no recibió por escrito las acusaciones que se le hicieron, ni se le dio espacio para defenderse antes de su destitución. Rodríguez dijo que se comunicó con el nuncio apostólico en República Dominicana, que también atiende los asuntos de la Iglesia católica en Puerto Rico, pero no se le otorgó audiencia. Tampoco se atendió a la senadora Joanne Rodríguez Veve, que se comunicó para el mismo propósito, indicó el abogado. El licenciado destacó que en el pasado cuando hubo intento de destituir al arzobispo de San Juan, Roberto González Nieves se designó a un visitador apostólico -una persona de confianza del papa- para evaluar las denuncias, recopilar información y entreviste a personas, pero aseguró que eso no ocurrió en el caso de Monseñor Fernández Torres. “Nosotros somos la iglesia y nos debemos dejar sentir, hay que denunciar lo que está mal”, concluyó Rodríguez y exhortó a la comunidad laica, católica y no católica, a orar y a enviar cartas a Roma tras la destitución de Monseñor Fernández Torres de su cargo como Obispo de Arecibo.