Según salubristas, podría aumentar la posibilidad de que entren más personas contagiadas con COVID-19 a la isla luego que desde el domingo se eliminó en Puerto Rico y Estados Unidos el requisito de pedir una prueba negativa para vuelos domésticos como internacionales. Al ser el verano una de las temporadas que más tráfico aéreo genera, se anticipa que la exposición al virus aumente en cualquier tipo de vuelo.
Fuente: El Nuevo Día