27 de octubre de 2022 12:51 pm
Sentencian a exdirectores de Obras Públicas de Guayama y Cataño vinculados a esquemas de corrupción con asfalto

El exdirector de Obras Públicas del Municipio de Guayama y el exdirector de Obras Públicas de Cataño fueron sentenciados por su participación en esquemas de soborno separados en los que recibieron efectivo a cambio de aprobar pagos de facturas para una empresa de asfalto y pavimentación J.R. Asphalt.
Según documentos judiciales, Ramón Conde-Meléndez, de 56 años, fue Director de Obras Públicas en el Municipio de Guayama desde 2013 hasta 2022.
En 2019 y 2021, Conde-Meléndez acordó recibir y recibió pagos en efectivo de un individuo (Individuo A) a cambio de certificar que la empresa de asfalto y pavimentación (Empresa A) realizó obras de asfalto en el municipio.
La certificación se requería para la aprobación de facturas de pagos del municipio de Guayama a la Empresa A. En 2019 y 2021, Conde-Meléndez recibió pagos de sobornos, equivalentes a $1 por cada metro cuadrado de asfalto removido por la Empresa A, que sumaron más de $15,000 .
Además de la pena de 2 años de prisión, fue condenado a dos años de libertad supervisada. En mayo de 2022, Conde-Meléndez se declaró culpable de conspiración para cometer sobornos en programas federales.
Mientras, Pedro Marrero-Miranda, de 54 años, fue Director de Obras Públicas en el municipio de Cataño desde 2017 hasta 2021.
En 2019, 2020 y 2021, Marrero-Miranda acordó recibir y recibió pagos en efectivo del Individuo A y otro individuo (Individuo B) a cambio de la distribución de proyectos de remoción de asfalto por parte del municipio de Cataño a la Empresa A, y la certificación de facturas por pagos del municipio de Cataño a la Empresa A.
Específicamente, Marrero-Miranda recibió múltiples pagos de sobornos equivalentes a aproximadamente $1 por cada metro cuadrado de asfalto removido por la Empresa A en el municipio de Cataño, lo que sumó más de $40,000.
Además de la pena de dos años y seis meses de prisión, fue condenado a tres años de libertad supervisada. En junio de 2022, Marrero-Miranda se declaró culpable de conspiración para cometer sobornos en programas federales.