El Negociado de Energía dijo hoy que durante la administración de Luma Energy se deterioraron los datos que miden el número de interrupciones del servicio eléctrico y la duración de estas interrupciones.
A pesar de esto, el consorcio solicitó un aumento de 2.60 centavos o 18.4% en la factura de luz de sus clientes residenciales para el primer trimestre de 2022. El Negociado de Energía está a cargo de evaluar el propuesto aumento y de aprobarlo entraría en vigor en marzo del 2022.
“Los clientes estuvieron expuestos durante el periodo de junio, julio y agosto de este año a más interrupciones, de mayor duración, en comparación con las métricas históricas o baselines”, sostuvo el Negociado sobre las métricas evaluadas.
Agregó que estas interrupciones resultaron en un deterioro constatado en el servicio.
Ante esta situación, el Negociado advirtió a LUMA que espera ver que estas métricas regresen a sus niveles históricos y comiencen a mejorar.
De lo contrario, la empresa se expone a multas administrativas por incumplimiento con su deber de mejorar el sistema eléctrico. El Negociado también advirtió a LUMA que debe acelerar el paso para poner al día los sistemas de contabilidad de la empresa. El retraso en el manejo de estos datos financieros impacta negativamente la habilidad de la empresa de proveer ciertas métricas al Negociado.
