La principal oficial médico del Departamento de Salud, Iris Cardona, rechazó que haya escasez de tratamientos monoclonales en la isla, pero explicó que la cantidad disponible es limitada pues llegan semanalmente y se ha visto una mayor demanda ante el alza de casos por Covid-19.
La pediatra explicó que las autoridades federales se encuentran evaluando la efectividad de estos medicamentos por una posible resistencia ante la variante Ómicron y que ya no estarán despachando dos de las tres opciones existentes de este tipo de tratamiento.
En Puerto Rico hay 23 instalaciones aptas para administrar estos fármacos, según mencionó Cardona. Y es que este tipo de tratamiento se administra como una infusión para personas que ya estén contagiadas de Covid-19, por lo que los lugares deben estar habilitados para asegurar el aislamiento del paciente y contar con el equipo y personal médico adiestrado.
En el caso de una persona que requiera este tratamiento y vaya alguna instalación en donde no lo haya, la institución debe pedir una transferencia o enviar al paciente a otro lugar en el que esté disponible. Otra alternativa, sería contactar alguna compañía que brinde el servicio en el hogar.