
Rafael Rivera Ramos, querellante en el caso por agresión que enfrenta el portavoz del Senado Javier Aponte Dalmau, está pidiéndole $50,000 al legislador popular a cambio de que no enfrente una demanda por daños y prejuicios.
“Es el interés del suscribiendo presentar formalmente una reclamación extrajudicial por los hechos y daños experimentados por el señor Rivera y de esta forma interrumpir el término prescriptivo. En este momento, nuestro representado solicita una compensación de $50,000. Rogamos que usted o su abogado se comunique con el suscribiente para dialogar sobre este asunto y otros, de quizás mayor importancia para su carrera política”, indicó el abogado Antonio Iguina González en una carta que llegó a Cuarto Poder (WAPAT-TV).
Mientras, los abogados José Andreu Fuentes y Ricardo Prieto García le dijeron al fiscal asignado al caso Orlando Velázquez, que la carta es una extorsión y pidieron que Rivera Ramos sea investigado por alegación falsa de delito.