La Liga de Béisbol Profesional de Puerto Rico Roberto Clemente (LBPRC) le pidió al gobernador Pedro Pierluisi una dispensa para no tener que solicitar una prueba negativa a los asistentes de los juegos de la temporada invernal. La petición fue enviada a través de una carta con fecha del lunes pasado en la que la liga propuso a cambio reducir el aforo de los estadios a un 33 por ciento.
En la carta expresan lo “imposible” que sería pedirle un resultado negativo de Covid-19 a los fanáticos del deporte por “la complejidad de conseguir la pruebas” para estos eventos que se realizan “básicamente todos los días”.
La más reciente Orden Ejecutiva exige una prueba negativa con vigencia de no menos de 48 horas de anticipación para eventos multitudinarios que sobrepasen las 500 personas. Ayer la Asociación de Laboratorios Clínicos de Puerto Rico alertó sobre la “carga”que esta medida representa para los laboratorios locales, pues entienden que afecta el acceso para quienes requieran realizarse una prueba por requerimiento médico.
La LBPRC fue enfática en que para entrar a los juegos se pide prueba de vacunación y que los partidos “no propicia[n] aglomeración” pues las facilidades de los parques permiten que se lleven a cabo con distanciamiento social. Según la misiva, en lo que va temporada “la mayor asistencia se registró en la inauguración de los Cangrejeros en el Hiram Bithorn, con 5,500 fanáticos”, lo que se traduce a un 33 por ciento del aforo de ese estadio.
En cuanto a la temporada de béisbol invernal, que ya comenzó, se espera que se extienda hasta la penúltima semana de enero cuando se conocerá al equipo que representará a Puerto Rico en la Serie del Caribe 2022 a celebrarse en la República Dominicana.
