Ante la reciente recomendación de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) sobre la reducción el periodo de cuarentena y las largas filas en laboratorios y centros de pruebas de COVID-19 en los municipios, una epidemióloga recomendó que sólo las personas con síntomas deben ir a realizarse la prueba.
Para la epidemióloga Roberta Lugo, lo más importante es internalizar que, de no experimentar síntomas, no es necesario realizarse la prueba. En este caso, las medidas más aptas siguen siendo el uso de mascarilla, el distanciamiento social y el lavado de manos.
El lunes los CDC emitieron nuevas recomendaciones con respecto a las estrategias de cuarentena por contagio del COVID-19. Estas establecen solo cinco días como periodo de aislamiento para personas contagiadas sin síntomas, seguido de cinco días utilizando mascarilla.
Lugo recordó que, por el momento, el Departamento de Salud no ha acogido la recomendación de los CDC, por lo que los protocolos establecidos en la isla permanecen iguales.
Aunque expresó que es importante mantenernos al tanto con las estrategias impartidas por los CDC, especificó debemos prestar atención a las particularidades de la isla donde recientemente los contagios han aumentado y por lo que se pronostica un alza en hospitalizaciones.
Por ende, entiende que las medidas establecidas por el Departamento de Salud de 10 días de cuarentena para contagiados sin vacuna y 7 días para contagiados vacunados, deben ser respetadas por el momento.
“El CDC se basa en las tendencias mundiales donde las oleadas de infecciones son mayores, pero las hospitalizaciones se mantienen bajitas comparadas a los contagios por la variante Delta.”, expresó una fuente vinculada a las autoridades de salud que prefirió no ser identificada.
Al preguntarle sobre qué recomendaciones ofrecería a los ciudadanos para actuar responsablemente comentó que “ahora mismo, más que el distanciamiento y el lavado de manos, lo que más valor (de protección) tiene es el utilizar la mascarilla en todo momento”.
Los síntomas por la variante ómicron se reflejan durante los primeros dos días, el quinto día ya están resueltos y al octavo ya no hay infección. En comparación, la variante Delta tarda al menos cinco días en mostrar sintomatología.
