A 36 horas del apagón general, no queda claro cuándo todos los puertorriqueños y puertorriqueñas tendrán luz puesto que todavía continúan los trabajos de reparación en la central Costa Sur, en Guayanilla, una pieza esencial para la restauración del servicio a todo el archipiélago.
La noche del miércoles, el gobernador Pedro Pierluisi Urrutia, informó a través de sus redes sociales, que restablecer el servicio tomaría de 12 a 24 horas. Pierluisi Urrutia se encuentra de viaje por España y tiene previsto regresar el lunes.
Actualmente hay 1,000 megavatios de generación, que es menos de la mitad que se necesita para suplir la demanda promedio del archipiélago. Según datos que ofreció LUMA Energy, actualmente hay entre 600,000 a 650,000 clientes residenciales y comerciales con servicio de un total de 1.5 millones.
En rueda de prensa desde la sede de la Autoridad de Energía Eléctrica, (AEE) en Santurce, el vicepresidente de asuntos comerciales de LUMA, Kevin Acevedo, indicó que la expectativa era que antes de que acabe el día de hoy 1 millón de clientes recupere el servicio, pese a que todavía quedan trabajos por completar en Costa Sur.
Tampoco ofreció un término específico para la recuperación total del sistema eléctrico, que depende de precisamente de las reparaciones en Costa Sur.
“No tenemos que esperar a que se completen todas las reparaciones. Hay un área en el patio donde estaba el interruptor y con la reconfiguración de las líneas la AEE podría sacar su producción”, indicó el director ejecutivo de la AEE, Josué Colón.
Explicó que la planta de generación de Costa Sur y EcoEléctrica están listas para sumarse a la red, pero que ese proceso dependerá de la disponibilidad de las líneas de transmisión, que opera LUMA.
Colón señaló que una vez estas plantas reciban el visto bueno para distribuir energía a través del sistema de transmisión, tomará 18 horas a EcoEléctrica sincronizarse al sistema y 24 horas a Costa Sur. Eso significa que la recuperación del sistema se extenderá como mínimo hasta el fin de semana. El funcionamiento de estas dos centrales es necesario para la recuperación total del sistema.
Durante una conferencia de prensa, que se extendió casi dos horas, los portavoces de LUMA, Acevedo y la ingeniera Shay Bahramirad, ofrecieron respuestas vagas y generales sobre la avería que dejó al archipiélago a oscuras y que avivó las memorias del colapso del sistema tras el embate del huracán María. Pero contrario a ayer, hoy Acevedo limitó sus expresiones y no realizó comentarios floridos, como comparar el apagón con una noche de nieve. Bahramirad ofreció respuestas técnicas en inglés.
El operador privado no contó con un intérprete de lenguaje de señas durante la transmisión, ni una persona que tradujera al español sus respuestas en momentos en que el acceso a la información es esencial. Por administrar el sistema de transmisión y distribución durante 15 años, LUMA generará ingresos por $1,500 millones, sin contarlas bonificaciones.
Ante las dudas que ocasionó la aspiración de restablecer el servicio a 1 millón de personas durante el día de hoy, Colón respondió que eso se podría lograr si durante el día de hoy se conectaban al sistema las plantas de Palo Seco y AES.
Al ser abordada sobre el proceso de mantenimiento al interruptor que causó el fuego que colapsó el sistema, la ingeniera Bahramirad planteó que la pregunta estaba a destiempo y que esa información se conocería cuando se divulgue el informe de hallazgos de la avería.
Ayer, durante una vista a Costa Sur, el director de Transformación de Mercado de LUMA, Daniel Hernández, reconoció que el interruptor que causó la avería tenía más de 40 años y había superado su vida útil. Aunque estaba obsoleto, indicó que tenía el mantenimiento al día
