Los camioneros dicen que el pasado 22 de diciembre de 2020, luego de 15 años, y por solicitud de las organizaciones de transportistas, se autorizó un reajuste de las tarifas de 36%, tomando en consideración todos los factores económicos y de interés social requeridos por la ley y la Junta de Supervisión Fiscal no quiso participar de la discusión.
Aunque no van a detener, por ahora, los servicios de acarreo en el país, el liderato de la transportación pública decretó un estado de emergencia.
Fuente: El Nuevo Día
