Verdejo transitó por el puente Teodoro Moscoso mientras se trabajaba todavía la escena del cuerpo de Keishla Rodríguez

El exboxeador Félix Verdejo Sánchez pasó por el puente Teodoro Moscoso el día en que las autoridades encontraron el cuerpo de Keishla Rodríguez Ortiz en la laguna San José y todavía trabajaban en la recuperación de evidencia en la escena del crimen, afirmó hoy el teniente José Bonilla Ruiz.

El octavo testigo en el juicio por jurado que se sigue contra el excampéon contó que mientras unos agentes ocupaban dos casquillos de balas y evaluaban una mancha de sangre en el puente -por donde discurre el cuerpo de agua- divisaron a Verdejo Sánchez.

“Se estaba tratando de controlar el flujo de vehículos y logré escuchar por radio que el joven Verdejo estaba transitando por el puente Teodoro Moscoso y casualmente me percato que el joven Félix Verdejo se encuentra en una Honda Pilot negra, en el asiento posterior”, indicó a preguntas de la fiscal Jeannette Collazo Ortiz.

Minutos antes, relató frente al jurado compuesto por nueve hombres y tres mujeres las condiciones en las que apareció el cuerpo de la mujer de 27 años.

“La joven se encontraba boca abajo. Pude apreciar que tenía amarrada las manos y los pies y entre el área de las manos y la cintura tenía un bloque. Estaba amarrada con un alambre”, detalló mientras la mamá de la víctima Keila Ortiz -sentada en el segundo banco- apretaba las manos.

Ante el juez federal Pedro Delgado Hernández, el entonces director de la División de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Criminales (CIC) indicó que de Isla Verde partió con unos agentes a Caguas a ocupar un arma que aparecía registrada a nombre de Verdejo Sánchez.

Ya en ese momento el excampeón figuraba como sospecho en la desaparición de Rodríguez Ortiz, con quien sostenía una relación extramarital. La Policía lo estaba siguiendo como medida preventiva y había procurado órdenes de registro y allanamiento para ocupar sus armas y lograr acceso a los récords de su celular.

“Allí llegamos a la residencia. El joven (Verdejo) se encontraba con una dama y el agente Manuel Colón desarrolló la entrevista y ocupó el arma de fuego. Me percaté inmediatamente que se encontraba la guagua donde estaba montado en el Teodoro Moscoso”, apuntó.

Ese 1 de mayo de 2021, los agentes también regresaron a la residencia que el ahora acusado compartía con Eliz Santiago Sierra a ocupar otras armas, que se encontraban en una caja fuerte. Todas las armas del expúgil eran legales.

“En ese momento el comportamiento de la dama fue diferente de la primera vez que hablamos. Estaba bien nerviosa, traumada y preocupada. Estaba con su padre y madre. Nos indicó que no podía con lo que estaba sucediendo, que en la redes la ciudadanía la acusaba a ella de lo que pasó a la joven y que si era Félix Verdejo el responsable que pagara”, indicó en medio de las objeciones de la abogada Gabriela Cintrón Colón.

En la víspera, en la primera visita a su casa, Santiago Sierra se mostró cooperadora y tranquila, según el testigo. La mujer también indicó que no había tenido comunicación con su compañero y que la última vez que había hablado con la víctima había sido unos días previos, cuando llegó a la casa junto a su hermana Bereliz Rodríguez a contarle que estaba embarazada.

En su turno, el licenciado Jason González Delgado cuestionó al agente sobre las razones para no detener a Verdejo Sánchez en el puente si ya la Policía lo había identificado como un sospechoso.

“¿Por qué no lo detuvo cuando pasó por el puente?”, preguntó.

“Estaba prácticamente tirado para atrás en el asiento posterior mirando al agua. Estaba de retirada. Los agentes estaban recogiendo la evidencia”, respondió.

“¿Por qué no lo arrestó?”, insistió González Delgado.

 “No lo vi necesario en ese momento”, sostuvo el teniente.

“Un sospechoso estaba pasando por el lugar que estaba investigando, ¿y usted lo dejo ir?”, machacó el abogado. 

“Yo no estaba a cargo de la investigación”, soltó Bonilla Ruiz.

El abogado también llevó al testigo a reconocer que Iván Santana, otro exnovio de la víctima, le dijo en la entrevista que le había hecho que se alejó de Keishla Rodríguez para “no antagonizar” con su exmarido Marcelino Pérez, quien lo había confrontado en algún momento de la relación.

Desde que inició el proceso judicial la defensa intenta establecer que existían otras personas en el círculo de la víctima que eran violentas y que podían tener alguna razón para cometer el crimen.

Durante el cuarto día del juicio los fiscales Collazo Ortiz y Jonathan Gottfried también sentaron a declarar al agente José Torres Bayrón y al agente Rafael Ortiz Piñero.

Torres Bayron entrevistó a Verdejo Sánchez la tarde del 29 de abril de 2021 y éste le dijo que había hablado con Keishla Rodríguez por última vez el 28 de abril. Que habían acordado verse el 29 en la mañana para que ella le mostrara una prueba de embarazo, pero que este encuentro no se produjo porque ella no lo contactó.

El agente también reconoció a preguntas del licenciado González Delgado que la hermana la víctima le había dicho que en una ocasión Marcelino Pérez había tratado de hacerle daño a su hermana. El exesposo de la víctima, según la evidencia presentada, estuvo en Nueva York del 24 de marzo al 29 de abril del 2021, día en que desapareció Keishla Rodríguez. El hombre de 59 años viajó ese noche a Puerto Rico y tan pronto fue entrevistado por el agente Ortiz Piñero pasada las 11:00 p.m.

El juicio continúa el lunes a las 9:00 a.m.

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